VIAJE TOTAL; 1009.9 km; 10.4 l/100 km; 3 noches área AC municipal gratuita + 1 noche aparcamiento gratuito
Nuevo puente por delante, aunque no tan amplio como nos hubiese gustado, seguimos alargando un poco nuestros desplazamientos para ir conociendo lugares cuya visita teníamos en nuestros pendientes. En esta ocasión, teniendo en cuenta la distancia y la climatología nos decidimos por el interior de la comunidad de Murcia, habíamos estado en la costa pero no en el interior, así que hacia allí nos dirigimos, en concreto a la ciudad de Caravaca de la Cruz, población habitada desde los tiempos iberos, pasando por los romanos, musulmanes y finalmente los cristianos, siendo siempre un enclave fronterizo, hecho este que ha marcado su desarrollo. Se encuentra dispuesta en torno a su castillo, construido en el s.XV por los Templarios. La Vera Cruz se encuentra en la ciudad desde el s.XIII, se trata de varios fragmentos de La Cruz donde fue crucificado Cristo, están conservados en un relicario con forma de cruz de doble travesaño, emblema de la ciudad.
Nuestro viaje coincide con la edición anual del Gran Mercado Medieval, algunas de las principales calles del casco histórico se engalanan y se dan cita numerosos artesanos y actividades de animación, por lo que el área está bastante llena, la entrada al área se encuentra en uno de los puntos de acceso al mercado pero respetan la entrada y el uso de la misma.
Área AC Municipal Gratuita Caravaca de la Cruz
Se trata de un área municipal gratuita, buen acceso desde la entrada a la localidad, aunque no viene indicada en las señales de tráfico basta con seguir las indicaciones hasta el parque de bomberos, el navegador te lleva hasta la misma entrada sin problemas. Está muy bien ubicada para acceder al centro histórico de la localidad y a las Fuentes del Marqués, otro de los reclamos turísticos de la localidad. La ubicación del área puede resultar un tanto insegura en caso de que nos quedemos solos, no hay mucho tránsito de personas, se encuentra junto al parque de bomberos y pegado a un complejo deportivo. Desde el mismo área se tienen buenas vista del casco histórico con la Basílica-Santuario de la Santísima y Vera Cruz.
El área está completamente perimetrada, asfaltada y bien nivelada, no es necesario el uso de calzos, tiene disponible 2 mesas y bancos de picnic, no tiene sombra, por lo que en temporada de calor no creo que sea posible estar allí. Dispone de 13 plazas, aunque justo al lado hay una gran esplanada en la que también se puede pernoctar (2ª imagen añadida anteriormente). Una zona de servicios con grifo diferenciado de agua limpia y WQ, fácil de usar y en buen estado. La toma de agua potable con grifo de rosca y con buena presión de agua. El desagüe de grises es la única pega, la rejilla es pequeña y la pendiente no está bien hecha, así que hay que ajustar mucho para que el agua no se vierta hacia el exterior de la plataforma, como le pasó a algún que otro usuario.
La tarde la aprovechamos, aparte de para confirmar una visita guiada para el día siguiente con una empresa turística, para una primera toma de contacto con la ciudad y palpar el ambiente navideña de la misma, incrementado por la celebración del Mercado Navideño, aunque no empezaba hasta el día siguiente y estaba en pleno proceso de montaje. lo que si pudimos sacar en claro fue la perfecta ubicación del área para visitar Caravaca de la Cruz.
Salimos un poco del casco histórico ya que estaba en plena fase de montaje del mercado, hacemos una incursión por la calle Gran Vía, eminentemente comercial, llegamos a la plaza de San Juan y de ahí hasta la Calle de la Corredera, flanqueada por el Convento Ntra. Sra. del Carmen y la Parroquia de Ntra. Sra. de la Concepción y finalizando en El Templete, uno de los monumentos más emblemáticos de la ciudad, del s.XVIII de estilo barroco.
Pasamos una noche muy tranquila, sin ruido, Después de desayunar nos dirigimos hacia donde nos habían citado para nuestra visita guiada. Por motivo del citado Mercado Medieval la visita con la empresa turística (https://www.guiasmur.com/), empieza directamente en la Basílica-Santuario de la Stma. y Vera Cruz, declarada Monumento Histórico-Artístico Nacional. Su origen es islámico pero ha sufrido muchas transformaciones. Tras su reconquista perteneció a 2 órdenes militares, primero a la del Temple hasta su desaparición y posteriormente a la de Santiago. En su interior se encuentra el Museo de la Vera Cruz.
Partimos hacia el casco histórico, no sin antes disfrutar de las fantásticas vistas de la población, y con lo primero que nos topamos es con el Monumento al Caballo del Vino, precioso conjunto que representa el inicio de la carrera del caballo con el equipo de 4 personas que lo acompañan, fiesta que se ha convertido en todo un referente de Caravaca, deriva de la tradición de subir el vino a lomos de caballos hacia la Basílica para que fuera bendecido.
Al seguir descendiendo nos podemos encontrar con el Museo Arqueológico, no llegamos a entrar pero solo ver el edificio bien merece una parada, está ubicado en la Iglesia de la Soledad, templo de la segunda mitad del s. XVI, construida sobre los restos de una ermita gótica.
A continuación pasamos a ver la Iglesia del Salvador, del s. XVI, aunque está sin terminar, nada más entrar impresionan su planta con sus 4 enormes columnas, aunque también podemos destacar el gran retablo del altar mayor, fue declarada Monumento Histórico-Artístico Nacional.
Nuestra visita guiada concluyó en la Casa Museo de los Caballos del Vino, ubicado en una vivienda rehabilitada del s.XVI, la entrada va incluida en la tarifa de la visita guiada, se trata de un espacio donde se expone la fiesta desde sus orígenes hasta la actualidad, da comienzo con un audiovisual para poder entender un poco mejor el sentimiento de los caravaqueños y caravaqueñas sobre su fiesta, Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.
La visita guiada la podemos considerar un acierto, lo que pensamos es que se queda un poco corta, creemos que por la interferencia del Mercado Medieval, que a lo primero que les obligó fue a invertir el sentido de la visita y no poder transitar bien por las calles del casco histórico, repletas de tenderetes. No obstante la recomiendo por el buen trato recibido y la calidad de las explicaciones del guía, precio de 11€/persona.
Ya en nuestro itinerario particular lo primero que hicimos fue hacer una parada técnica, y por suerte dimos con un sitio perfecto, muy buen trato y una buena carta, en un ambiente muy particular, incumpliendo un poco mis propias normas os dejo alguna fotito por si os apetece parar si visitáis la ciudad.
Ya por la tarde, fuimos andando, también se encuentra muy cerca del área, a otros de los atractivos turísticos de Caravaca de la Cruz, nos lo aconsejaron en la oficina de Información y Turismo, Las Fuentes del Marqués, nombre dado por sus antiguos propietarios, los marqueses de San Mamés y al nacimiento de varios manantiales. Dimos un agradable paseo pero la verdad es que nos esperábamos más contacto con el agua, se nota que la temporada de sequía en la que nos encontramos le han afectado.
El siguiente día, después de ver las previsiones meteorológicas y comprobar que no llovería, decidimos coger la moto y desplazarnos a la cercana localidad de Moratalla, situada sobre un cerro dominado por su Castillo Fortaleza, hay indicios de que el primer recinto islámico se levantó sobre restos ibéricos, posteriormente fue reconstruido por la Orden de Santiago.
La carretera por la que nos desplazamos es muy interesante, el primer tramo discurre por una zona de monte muy chula, algunas curvas pero sin problema, nos encontramos muy poco tráfico. Al llegar a Moratalla nos dirigimos directamente con la moto hacia el Castillo Fortaleza, calles muy estrechas y empinadas que le confieren un encanto especial, daba reparo hasta meternos con la moto, en alguna calle nos costó un poco arrancar de nuevo por la pendiente de la misma. Aparcamos a los pies del Castillo y accedimos al recinto amurallado, se nota que está bastante restaurado, hay que pagar 3€/persona, el recinto mantiene 5 torres, pero lo verdaderamente imponente es la Torre del Homenaje, del s.XV, actualmente cuenta con tres plantas. Desde arriba se tienen unas vistas impresionantes de la localidad, impresiona lo sinuosos de sus calles, donde apenas se distinguen desde la altura, se ve un gran entramado de tejados sin orden, sin uniformidad, como de haberse adaptado al terreno. También se tienen muy buenas los montes que la protegen por un lado y la planicie por el otro.
Después de nuestra corta visita a la localidad de Moratalla nos dirigimos hacia nuestro siguiente destino, el pueblo de Cehegín, para ser sinceros nunca habíamos escuchado, aunque nos dieron buenas referencias y por eso nos decidimos a visitarla. Para quien se decida visitar esta bella localidad comentarle que dispone de un área privada que tiene muy buenas referencias, en principio nosotros íbamos a pernoctar en ella pero viendo la cercanía con Caravaca de la cruz decidimos desplazarnos en la moto.
Como introducción a la historia de la localidad comentar que se fundó en la Edad Media aunque se han encontrados restos de la prehistoria, íberos, romanos, visigodos, árabes y cristianos. Su nombre deriva de la época árabe. La localidad está declarada Conjunto Histórico - Artístico. Su casco antiguo posee empinadas cuestas y estrechos callejones, vestigio de la época árabe para posteriormente, tras la reconquista, levantar casas y palacios con sus blasones en las fachadas.
Nada más llegar y buscando donde aparcar en el casco histórico nos topamos de lleno con la oficina de información y turismo, así que hicimos nuestra parada para poder coger nuestro mapa y organizar mejor la visita, nos encontramos con el hándicap del horario de cierre de los distintos monumentos, que según nos informaron eran todos gratuitos.
Aparcamos en la Plaza del Castillo y por organizar un poco la visita por falta de tiempo decidimos retroceder un poco y dirigirnos en primer lugar al Ayuntamiento, ubicado en un antiguo edificio barroco del s.XVIII, la Casa Jaspe, consta de 3 plantas y ático, impresiona nada más acceder la gran escalera que daba acceso a la parte noble, más o menos igual que ahora, ya que conduce al salón de plenos.
Subiendo por la Calle Mayor pasamos por delante del Casino, se trata de un edificio barroco del s.XVII, en la 2ª planta destacan un gran balcón flanqueado por 2 grandes blasones familiares. Decidimos hacer una parada técnica y tuvimos una mala experiencia, intentamos tomarnos un vino en la misma barra y no nos quisieron atender, estaba completamente vacía porque, según nos dijeron en breve se llenaría el local ya que estaban todas las mesas reservadas y estaban muy liados, con el local vacío casi por completo no nos quisieron atender, increíble.
En la misma calle podemos ver. solo por fuera porque creo que no son visitables, se encontraban cerradas con la Casa de las Boticarias y el Palacio Duque de Ahumada.
Accedemos de nuevo a la Plaza del Castillo, donde lo primero que nos llama la atención es el Mirador Plaza del Castillo - Soportales, edificado a principios del s.XVIII para albergar en su planta superior los palcos de las grandes familias de la localidad para poder ver bien los distintos actos que se celebraban en la plaza.
Lo que más nos sorprendió de la localidad, el Museo Arqueológico, muy completo para el tamaño de Cehegín, ocupa tres edificios, la Casa del Consejo, declarado Monumento Histórico-Artístico Nacional, el Archivo Histórico y el Palacio de los Fajardo, también declarado Patrimonio Histórico-Artístico, su origen es del s.XVII pero sobre otro edificio del s. XVI. Dedicamos un buen rato en el museo, que hace un buen recorrido por todos los periodos por los que ha pasado la localidad, sorprendente y muy interesante, además de entrada gratuita y con personal disponible para pedir información y con un trato exquisito.
En la plaza también se encuentra la Iglesia Mayor de Santa María Magdalena, del s. XV, declarada Monumento Nacional y de las mismas características de las que venimos viendo en esta parte de Murcia, impresionan sus grandes columnas.
Saliendo de la plaza se puede acceder a una delas puertas de la ciudad que aún se conservan, la Puerta de Caravaca, de época Musulmana y la Casa de las Columnas.
Para terminar nuestro recorrido por Cehegín nos dirigimos hacia la Iglesia de la Purísima Concepción, del s.XVI, también declarada Monumento Histórico-Artístico Nacional, estilo renacentista con artesonado Mudéjar, bastante interesante pero que no pudimos disfrutarlo bien porque entramos justo antes de su cierre y no nos pudimos entretener.
En uno de sus laterales nos encontramos con el Paseo de la Concepción, un parque que constituye todo un magnífico mirador de la vega y parte de la localidad.
En definitiva una visita que nos ha sorprendido gratamente y que bien merece dedicarle más tiempo, máxime cuando dispone de un buen área disponible para nuestro colectivo, que si bien no la hemos visitado, todas las referencias son magníficas, así que dejamos pendiente una segunda visita, la única pega es que no conseguimos encontrar ningún sitio en el casco histórico en el que tomarnos un vino y poder descansar un poco de nuestro largo día, no quisimos llevarnos un mal recuerdo por este contratiempo y pusimos rumbo hacia Caravaca de la Cruz.
La tarde la dedicamos a disfrutar del Mercado Medieval, se encontraba en pleno apogeo de visitas, muchos quioscos de artesanía de diferentes temáticas, alimentación con productos típicos de diferentes lugares, restauración..., muy completo y grande. Llegamos a entrar en un par de sitios muy interesante, el Museo de los Aparatos de Tortura, ubicado en una antigua iglesia, contenido y continente espectaculares por separados pero juntos..., Eva no fue capaz de verlo por completo, y el Museo de las Brujas, ubicado también en un sitio espectacular que le venia... un claustro muy bien acondicionado, poca luz, luces indirectas, en definitiva un aspecto siniestro total. Ambos museos de pago, 3€/persona cada uno pero bajo nuestro punto de vista merece la pena.
Tras un largo día volvemos bastante cansados a la autocaravana y decidimos adelantar un día nuestra vuelta para hacer una parada en uno de nuestros sitios fijos todos los años en estas fechas, aprovechando que tenemos que pasar por allí haríamos una parada en la que consideramos nuestra segunda ciudad, Granada.
Nos levantamos sin prisas después de volver a pasar una noche bastante tranquila y después de desayunar y realizar los servicios en la autocaravana ponemos rumbo hacia Granada, en todas nuestras anteriores visitas, por falta de otras alternativas, hemos pernoctado en campings o en área de autocaravana privada, además de haber pernoctado alguna vez en Sierra Nevada, esta vez decidimos probar en el aparcamiento del Centro Comercial Nevada, bastante comentado en las distintas redes del sector, así que hacia allí nos dirigimos.
Aparcamiento gratuito de Centro Comercial Granada
Aparcamiento gratuito de un centro comercial, en realidad no está habilitado como aparcamiento pero permiten el aparcamiento y la pernocta de autocaravanas, el centro comercial dispone de aparcamiento cubierto y otro en superficie. Hay 2 zonas diferentes, la primera tiene un acceso un poco complicado, hay que tener mucho cuidado sobre todo cuando hay mucho tráfico. El suelo es de grava, más o menos nivelada, no tuvimos que poner niveladores, nada de sombra y ningún tipo de servicios, ni siquiera contenedores de basura o papeleras. Justo al lado hay una parada de metro que te deja justo a la entrada del casco histórico, por lo que resulta una ubicación perfecta para visitar Granada. Hay un poco de ruido por la música del centro comercial y por el tráfico, está a pie de carretera justo enfrente de una gran rotonda con mucho tráfico, pero cesa en el momento que cierra el centro comercial y se puede dormir tranquilamente. En el aparcamiento en el que pernoctamos nosotros amanecimos en torno a las 50 autocaravanas, no contabilice las del aparcamiento de al lado pero como mínimo otras 20-25 más.
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